Con un incremento del 208,67% en los contratos de alquiler regidos por la antigua normativa, miles de inquilinos se ven obligados a enfrentar un panorama complicado en diciembre, mientras algunos buscan renegociar o rescindir sus contratos ante la difícil situación del mercado inmobiliario.
En diciembre, los inquilinos se preparan para afrontar un drástico aumento del 208,67% en los alquileres bajo la vieja ley, lo que afectará a miles de arrendatarios en un contexto inmobiliario ya complicado. Este ajuste, que se basa en el índice del Banco Central, toma en cuenta la inflación medida por el IPC del INDEC y la variación de salarios según la remuneración promedio de los trabajadores estables (RIPTE). Por ejemplo, un alquiler que costaba $200.000 hace un año se elevará a $617.339 en pocos días.
A pesar de que las cifras continúan siendo elevadas, los últimos meses han mostrado señales de desaceleración en los incrementos: en noviembre se registró un aumento del 227,3%, en octubre del 238%, y en septiembre del 243,1%. Este alivio moderado llega en un momento en que muchos inquilinos consideran la posibilidad de renegociar sus contratos con los propietarios o incluso rescindirlos, dado que la oferta de alquileres ha comenzado a ajustarse a la realidad del mercado, aumentando respecto al año anterior.
Con info de CONTRUMIS