La provincia del Nordeste Argentino registra un aumento del 92,6% en su Producto Bruto Geográfico en los últimos cinco años, impulsada por una economía diversificada, industrialización y políticas públicas que fomentan la innovación y el desarrollo sostenible.
Misiones encabeza el crecimiento económico en la región NEA, con un Producto Bruto Geográfico (PBG) per cápita de 23.300 dólares, consolidándose como el principal motor del desarrollo en el Nordeste Argentino. En los últimos cinco años, la provincia registró un incremento del 92,6% en este indicador, reflejando una economía dinámica, diversificada y basada en la industrialización y el conocimiento.
El éxito económico de Misiones se traduce también en cifras totales: en 2024, el PBG alcanzó los 35.000 millones de dólares, equivalente al Producto Interno Bruto (PIB) del país a nivel provincial, que mide el valor de todos los bienes y servicios producidos en su territorio.
En comparación, Corrientes se ubica en segundo lugar en el NEA, con un PBG per cápita de 18.821 dólares y un crecimiento del 66% en el mismo período, aunque aún lejos del liderazgo de Misiones.
El crecimiento de la provincia se sustenta en diversos factores estratégicos y estructurales. Entre ellos, destaca el sector agroindustrial, donde productos como yerba mate, té y madera no solo se exportan en su estado primario, sino que también se industrializan localmente, generando mayor valor agregado y empleo.
A diferencia de otras provincias que dependen en gran medida de la exportación de materias primas, Misiones ha apostado por diversificar su matriz productiva, reduciendo su vulnerabilidad ante los cambios del mercado internacional. Este enfoque se complementa con políticas públicas que fomentan sectores estratégicos, como la economía del conocimiento.
Según la Agencia Tributaria de Misiones, en las últimas dos décadas el PBG per cápita creció un 120%, evidenciando una tendencia sostenida hacia el desarrollo. Las proyecciones indican que esta senda de crecimiento continuará, con especial atención en la innovación, la tecnología y la generación de empleos de calidad.
Este modelo económico, que combina producción, industrialización, exportaciones y desarrollo tecnológico, ha convertido a Misiones en un referente en desarrollo regional sostenible, demostrando cómo la planificación estatal y el impulso empresarial pueden potenciar el crecimiento económico de manera equilibrada.
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