Científicos argentinos descubren la presencia de dengue en murciélagos y roedores de las selvas de Jujuy, Catamarca y Misiones, alertando sobre su posible adaptación a ambientes naturales y el riesgo de que se convierta en endémico.


Un reciente estudio realizado por científicos de diversas provincias argentinas ha detectado anticuerpos contra el virus del dengue en murciélagos y roedores de las selvas de Jujuy, Catamarca y Misiones. Este hallazgo sugiere que el dengue se está estableciendo más allá de los centros urbanos.

En Misiones, se observó que hasta un 30% de los animales en áreas como el Parque Provincial Urugua-í mostraron exposición al virus. También se encontraron seroprevalencias significativas en los parques Iguazú y Piñalito. Este fenómeno, conocido como asilvestración, indica que el dengue podría estar adaptándose a ambientes naturales, lo que preocupa a los expertos por el riesgo de que se convierta en endémico en estos ecosistemas.

El informe, parte del proyecto Desafío N° 83 del programa Impact.ar, fue liderado por el Laboratorio de Arbovirus del Instituto de Virología de la Universidad Nacional de Córdoba. Contó con la participación de más de 30 científicos, incluyendo investigadoras de la Universidad Nacional de Misiones.

Durante 2021 y 2022, se analizaron 143 muestras de murciélagos y numerosos roedores, encontrándose anticuerpos contra el serotipo DEN-1 en un 2,8% de murciélagos y hasta un 30% de roedores. Esto sugiere exposición al virus, aunque no se identificó claramente a los amplificadores del virus en estos ambientes.

El estudio también reveló casos de dengue en invierno en provincias como Salta, Formosa y Chaco, y la presencia persistente del mosquito Aedes aegypti en el norte durante meses fríos.

Los investigadores realizaron capturas de mamíferos en parques provinciales como Cruce Caballero y Moconá, extrayendo suero para análisis. Sin embargo, aún no se sabe si estos animales actúan como hospedadores del virus.

El proyecto continúa investigando la posibilidad de transmisión vertical del virus en mosquitos y planea colectar mosquitos en las mismas áreas para evaluar la presencia del virus.

Este avance del dengue a zonas selváticas complica el control de la enfermedad, ya que estas áreas pueden convertirse en reservorios naturales del virus, dificultando su erradicación.